Se trata de la unidad número 2 de las construidas por Citroën Sport.
La palanca del cambio y la torreta correspondían al Súper 1600 de cambio secuencial.
Un papel –debajo había una placa mejor elaborada, pero más pequeña– nos avisaba de la extraña configuración de la caja de cambios.
El interior posee el tablero de mandos del coche de serie, al que se le han añadido numerosos mandos.
¡Cómo han evolucionado los pedalieres! Este es muy simple, casi de serie.
El arco de seguridad es también muy sencillo, conforme a la reglamentación de la época.