
Siguiendo la estela de BMW M o Mercedes AMG, Aston Martin ya tiene listos sus primeros modelos de serie creados por el departamento de competición, AMR.
El nombre Vantage ha sido durante mucho tiempo sinónimo de rendimiento extremo para Aston Martin desde la década de 1950, por eso sus responsables no han dudado en que el Vantage AMR debía ser la primera serie de su gama de deportivos inspirados en la competición. Anunciada en el Salón del Automóvil de Ginebra a principios de este año, la división Aston Martin Racing amplifica y acentúa el tacto deportivo de los coches de serie de la marca británica, tomando inspiración o influencia directa de la participación en el Campeonato Mundial de Resistencia (WEC) de la FIA con el Vantage GTE.

La marca AMR tiene dos niveles distintos. Los modelos de edición limitada, como el nuevo AMD Vantage, se sitúan en su punto de entrada, mientras que los modelos AMR Pro, extremadamente modificados, creados por la filial de personalizaciones Q (Aston Martin Advanced Operations), se sitúan en el pináculo de la gama, incluyendo el exclusivo Vantage AMR Pro Presentado en el Salón de Ginebra de este año. Los AMR Vantage se ofrecen con motor V8 de 430 CV o V12 de 565 a 595 CV. Ambos motores están equipados con transmisiones automáticas secuenciales manuales, o para los puristas, de seis y siete velocidades manuales.
Las gama de precios parte en Alemania de los 129.000 euros, y estarán disponibles a finales de año.


